LEVIATÁN
Edgardo
Rafael Malaspina Guerra
Leviatán
(1661) de Thomas Hobbes trata sobre el origen de la sociedad y el Estado. La
materia tiende a la conservación. El hombre es materia, y de allí el instinto
de conservación, originado porque teme ser atacado por otros hombres. El Estado
surge para frenar la violencia entre los hombres que pueden desear un mismo
objeto. El hombre es un lobo para el hombre, de allí la necesidad de un pacto
para no agredirse unos a otros.
Las
causas principales de este conflicto entre los hombres son tres: competencia, desconfianza,
y gloria. La primera de estas causas dice Hobbes impulsa a los hombres a
atacarse para lograr un beneficio; la segunda, para lograr seguridad; y la
tercera, para ganar .reputación.
Las
largas guerras en Inglaterra y la lectura de Tucídides influyeron en Hobbes para
escribir su obra. Hobbes tradujo al inglés la Guerra del Peloponeso, y con este
trabajo se inspiró para escribir su Leviatán : le impresionaron los discursos
políticos y el lenguaje de Tucídides.
1
La
sabiduría no se obtiene leyendo en los libros, se obtiene leyendo en los
hombres.
2
El
hombre vive en una eterna guerra de todos contra todos. De allí la necesidad
del surgimiento del Estado: para dirimir en las rencillas y establecer las
reglas de la paz.
3
Sin
un Estado regulador de la sociedad, la vida de los hombres es solitaria, pobre,
tosca, embrutecida y breve.
4
La
justicia se da cuando haya leyes que se cumplen.
La
ley sin la espada no sirve para nada.
5
E
hombre busca la paz por el temor a la muerte y el deseo de una vida confortable.
6
Cada
hombre debe esforzarse por la paz, mientras tiene la esperanza de lograrla; y
cuando no puede obtenerla, debe buscar y utilizar todas las ayudas y ventajas
de la guerra.
7
Los
hombres renuncia a sus derechos y se someten a un poder común para evitar
liquidarse unos a otros.
8
El
miedo a ser castigados frena las acciones violentas de los hombres.
9
En
el estado de naturaleza no hay ni justicia ni injusticia.
10
El
contrato social que conduce a una monarquía en vez de una democracia. La
monarquía, entonces, no tiene origen divino, sino natural: Dios creó el mundo y
el hombre el Estado. Ese pacto que funda la sociedad es artificial.
11
Sólo
el lenguaje humano hace posible la mentira.
12
El
Estado impone el respeto a la ley sólo mediane la fuerza y el terror.
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